¿QUÉ CONVERSACIÓN FALTA en tu EMPRESA FAMILIAR?
Por Mónica Ortolani – Tónica Online
¿Sabías que sólo el 5% de las empresas familiares llega a los nietos? ¿De QUÉ hay que hablar para lograr empresas exitosas , saludables y trascendentes, como la familia que la conforma? Te revelo 3 conversaciones claves que es vital tomar coraje y poner primera. En esta columna de acompañamos a hacerlas fáciles.
1- CONVERSAR de la SUCESIÓN
Los porcentajes que te compartí al inicio, nos dicen muy claramente que la mayor causa de mortalidad de las empresas familiares habitan en su propio creador. La transición a la segunda generación, es uno de los problemas más difíciles que afectan su supervivencia.
En las empresas familiares agropecuarias, la problemática se agudiza por la subdivisión de los establecimientos, que hace inviable desarrollar la actividad desde el punto de vista económico, y terminan vendiendo o subarrendando. Sin embargo, los invito a que puedan potenciarse desde las fortalezas y conomientos de los integrantes para poder explorar nuevos negocios y agregar valor.
Buenas relaciones, derivan en mejores resultados. Lo “no numérico”, determina “lo numérico”.
Soy una convencida que entramar a las generaciones, aprovechando sus potencialidades y dejarse acompañar por profesionales no familiares que potencien, es uno de los caminos de salida posibles.
Sin embargo nuestro cerebro nos hace una trampa , somos humanos. ¿Quién quiere hablar cómo va a continuar la empresa cuando ya no esté? ¿Quién me sucederá en el mando de la empresa?
Como creador de tu empresa, te invito a que comiences a pensarlo, escucharte y conversarlo con tu familia, personal directivo, o profesionales especializados, en cómo ir entramando y preparar a la segunda generación para la transición y tomar acciones.
Abrazar primero y pasar la posta, es un proceso, que requiere de momentos de respirar y caminar juntos el negocio, para luego trasmitir el poder y llegar a acuerdos coloridos, que no se expresen en blanco o negro, y que huelan a mates compartidos bien cebados. El fundador, conoce los valores y aspectos del negocio sobre los cuales puede seguir inspirando, desde otro lugar, con menores esfuerzos, aunque brindando “ése” ADN que vitalice, sin invadir. La sangre joven trae el entusiasmo y las nuevas ideas para potenciar el futuro.
Vivirlo como una danza, más que una sucesión de suelto y doy.
Sin embargo, cuando ya podés divisar con claridad, que nadie de la familia, va a continuar con la actividad, por ejemplo hermanos contratistas rurales, donde ninguno de sus hijos quieren seguir con la empresa, es necesario iniciar un proceso planificado de des-inversión y disolución, o re-inversión en nuevos negocios, sin que se viva como un “sacrilegio”, sino como una forma inteligente de revitalizar la trascendencia del bienestar familiar y resguardo patrimonial.
Conversar de la transición generacional, va mucho mas allá de la gestión.
Es la oportunidad para re pensar estratégicamente el negocio, potenciar lo que deseamos conservar, soltar los negocios que ya no son rentables y abrirse a las oportunidades de innovaciones en esa amalgama de experiencia y el brío propio de la sangre joven.
Las Chilcas, es uno de los casos emblemáticos, de que sí es posible. Al pie les dejo el link de una entrevista en Agrositio que Ricardo Bindi le realizó a uno de sus directores Mario Aguilar Benitez, en la que podés inspirarte. Una historia rica desde lo humano, lo productivo y lo ambiental, con agregado de valor y economía circular. Sustentabilidad familiar y empresaria por donde se la mire.
Poné primera, preparen el mate, reuní a tu familia y..: HABLEMOS de la TRANSICIÓN GENERACIONAL
Va mi #AgroDibus
2) CONVERSAR sobre nuestros ROLES
En las empresas de familia confluyen sistemas y personas que se relacionan entre sí:
1-PROPIEDAD (propietarios)
2- EMPRESA ( quienes trabajan)
3-FAMILIA (miembros de la familia)
Estos 3 grupos de intereses diferentes, generan otras 7 combinaciones posibles donde se entrelazan y que pueden visualizar en esta imagen
Los invito a que puedan reconocerse en estas siete áreas, y ubiquen en este mapa los nombres de tu familia y otros miembros del equipo de la empresa familiar.
Un mapeo a conciencia, es la oportunidad para formularse algunas preguntas que te regalo de disparador:
¿Qué fortalezas reconocemos en cada integrante?
¿Son aptos para la función que desempeñan? ¿Es acorde a sus talentos?
¿Si no fuera familiar tendría ese puesto?¿Los hemos capacitado?
¿Cada familiar está entusiasmado de trabajar en la empresa? ¿Le pregunté alguna vez cómo se siente y qué quiere?
¿Le permito desplegar su potencial? ¿Le estoy generando el espacio para que vayamos danzando la transición generacional?
¿Conversamos sobre nuestros roles y funciones sus funciones y qué esperamos?
¿Manifesté cómo me siento y qué quiero?
¿La empresa está al servicio de la familia? ¿O la familia al servicio de la empresa?
¿Qué podemos hacer diferente para lograr una empresa creativa y saludable?
Estas preguntas, te llevarán a respuestas, que te permitirán expresar: REVISEMOS nuestros ROLES.
No quiero dejar de mencionar, que es importante respetar, las decisiones de aquellos familiares que NO quieren participar en la empresa, bien como trabajadores , o propietarios, y se retiran.
Debería ser vivido, como una bendición, que permite la libertad de sus integrantes y es la manera de lograr sostenibilidad y bienestar en la empresa, en la mesa de los domingos y las fiestas de fin de año.
3) CONVERSAR sobre RETRIBUCIONES
El ejercicio anterior te llevará a un pasó aún más osado. Revisar las retribuciones que cada miembro percibe por dichos roles.
Es una de las chispas que encienden inconvenientes, especialmente cuando la familia se agranda, y se confunde la caja de la empresa con la caja de la familia, donde las urgencias y necesidades de ambos sistemas no se encuentran en sintonía.
Necesitarás dosis adicionales de objetividad, para diferenciar dos aspectos claves que son como mandamientos:
REMUNERACIÓN acorde al TRABAJO (independientemente si es o no familiar)
PARTICIPACIÓN en los RESULTADOS acorde al CAPITAL.
Además, se sugiere seguir una política de ahorro para contingencias, inversiones o innovación, previo al reparto de ganancias a los efectos de mantener la empresa con vitalidad hacia el futuro.
Es muy sanador realizar esta revisión, y llevar a la práctica esta diferenciación.
“Las remuneraciones, deben ser acordes a la función, y los dividendos, a la participación”.
Son comunes, 3 errores y te pido prestes atención en donde te ubicás:
1-Se “subvalúa” la remuneración al trabajo, total… “¡después le queda!”
2-Se “sobrevalúa” porque es familiar y además.. “¡lo necesita!”.
3-Se “aplica la misma vara”:Todos los familiares de igual generación deben ganar lo mismo.
Si en este momento ”algo te hizo ruido” y te queda dando vueltas en el estómago es hora EXPRESES: CONVERSEMOS sobre nuestras RETRIBUCIONES.
Finalmente ante cada decisión te preguntes ¿PARA QUIÉN es SALUDABLE?
Hay anécdotas de sobra, donde se realizan inversiones innecesarias y poco rentables, para crearle un puesto, ubicación o actividad a un miembro de la familia. Ante cada situación sincerarse, poner en la balanza ¿A quién beneficiás con esta decisión?¿Cómo afecta a la empresa? ¿Cómo a la familia?
A la inversa, realizan “ésa” inversión clave y pretenden “forzar” a un miembro de la familia para que se haga cargo ¿A quién beneficiás y a quién perjudicás con esa decisión? ¿Y si te apoyaras a en otra persona de tu confianza que realmente quiera, sienta y desee?
¿Quienes están siendo en sus decisiones? ¿A quién están priorizando?
TE SALUDO
Desde mi camino, desde lo económico y humano como coach me motivó compartir 3 conversaciones, “que se esquivan”.
1-SUCESIÓN
2-ROLES
3-RETRIBUCIONES
Lo “no dicho” se estanca, lo que se estanca, se “pudre”, y sabemos el final.
Mejor decir, SABER DECIR , HOY ES EL DÍA.
¿Qué conversación CLAVE está faltando en tu empresa de familia?
¿Te resulta difícil? Estamos para acompañarlos.
Por Mónica Ortolani – Tónica Online