Por Ignacio Iriarte | Analista Mercado Ganadero
China sigue asombrando. Pese a la caída de la actividad económica, a los efectos negativos de las estrictas cuarentenas y a la abundancia de carne de cerdo, en julio las importaciones de carne vacuna totalizaron las 270 mil toneladas.
La cifra representó un 44% más que julio del año pasado y es el volumen mensual más alto de la historia, superando holgadamente el récord anterior, las 237 mil toneladas adquiridas en enero del 2021.
Si se escuchan los argumentos de los importadores chinos y se toman en cuenta las predicciones de los analistas del mercado, todos los meses deberíamos esperar una caída del volumen de carne vacuna importada por este país.
Sin embargo, mes a mes las compras crecen y los precios CIF pagados ceden solo marginalmente, y a partir de niveles muy elevados.
De acuerdo con las exportaciones de carne vacuna del Mercosur, Estados Unidos y Oceanía con destino al gigante asiático del mes de julio y lo que va de agosto, que arribarán a puertos chinos en septiembre-noviembre, las importaciones de este país se mantendrían muy altas al menos por los próximos tres meses.
Debe recordarse que todos los años los importadores chinos compran grandes volúmenes de carne vacuna en julio-octubre, para el pico estacional de la demanda que se da con las fiestas del año nuevo lunar, cuyos festejos empezarán el 23 de enero próximo.
Un reciente documento del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (“China´s Import Potential for Beef, Corn, Pork and Wheat”) comienza recordando que los precios internos de la carne vacuna en China son un 80 a 90% más altos que los precios de la carne importada proveniente de Estados Unidos.
Pese a las voluminosas importaciones de carne vacuna de diferentes orígenes, ese diferencial de precios no se ha reducido en los últimos meses.
Este estudio dice que el consumo de carne vacuna en este país pasaría de 9,5 millones de toneladas en el 2020 a 11,6 millones en el 2030, y que el volumen importado pasará de 2,75 a 3,8 millones de toneladas en el mismo lapso.
La producción doméstica de carne vacuna en China está creciendo desde hace años a un ritmo muy inferior a la demanda.
El documento atribuye este inconveniente a que la mayoría del rodeo vacuno “carece de acceso a la tierra y al forraje”.
Todas las proyecciones que se hacen sobre el aumento del consumo chino de carne vacuna para los próximos años, coinciden en que ese incremento será cubierto casi en su casi totalidad con carne importada.
IMPORTACIONES
De acuerdo con los datos aportados por Lautaro Pérez Rocha (Inac), las importaciones globales de carne vacuna en el primer semestre de 2022 sumaron 25.391 millones de dólares, contra unos 20.262 millones de dólares de enero-junio del año pasado, lo que marca un aumento interanual del 25%.
De los 33 países o bloques importadores considerados, sólo dos (Rusia y Hong Kong) han disminuido sus compras de carne vacuna en el primer semestre del año.
El ranking lo encabeza China, que en enero-junio importó carne vacuna por valor de 7.578 millones de dólares, un 39% más que igual período del año pasado.
Le sigue Estados Unidos, con 4.224 millones de dólares (28 por ciento más); Corea del Sur, con 2.201 millones de dólares (27%); Japón, con 1.903 millones de dólares (14%); la UE-27, con 1.189 millones de dólares (47%); Egipto, con 790 millones de dólares (98%); Reino Unido, con 780 millones de dólares (31%); Taiwán, con 747 millones de dólares (50%); Chile, con 736 millones de dólares (9%); Canadá, con 528 millones de dólares (19%).
A partir del décimo lugar siguen Israel, con 503 millones de dólares (25%) y México, con 474 millones de dólares (7%).
Por Ignacio Iriarte | Analista Mercado Ganadero