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Los terneros y el efecto «puerta 12» en lo que va del año

Por Ignacio Iriarte | Analista Mercado Ganadero

En el primer trimestre de 2023, la venta de terneros se anticipó: alcanzó a 2,84 millones de cabezas, 25% más que en igual período del año anterior.

En enero-marzo de este año, la salida de los campos de cría de terneros y terneras fue de 2,84 millones de cabezas, un 25% más que en el primer trimestre de 2022, obedeciendo ese fuerte aumento a la sequía, que obligó a miles de criadores a vender sus terneros anticipadamente, con unos 20-30 kilos de peso menos que lo habitual.

En abril-mayo salieron 2,85 millones de terneros, sólo un 7% más que en igual trimestre del año pasado, comercializándose en mayo 1,39 millones de terneros, un 12% menos que en mayo de 2022. O sea que la salida fue muy intensa en el primer trimestre del año pero se desaceleró luego.

En lo que va del año (enero-mayo) han salido de los campos de cría 5,67 millones de terneros, un 7,6% más que el año pasado, debiéndose recordar que según los datos de la Primera Campaña de Vacunación el destete sería este año un 4% más alto que en el año 2022.

De acuerdo a la estacionalidad de la venta de terneros, y para un índice enero-diciembre = 100, el mes de mayores ventas en el año sería mayo, con un índice 176, para caer en junio a 133, julio a 100, agosto a 93, septiembre a 89, octubre a 67, y tocar el mínimo anual de oferta en noviembre, con un índice 51.

Si bien hay criadores que contando con buen campo o buenas reservas forrajeras, han retenido parte del destete a la espera de mejores precios, gran parte de los productores han vendido la mayoría del destete, con un peso más bajo que lo habitual, y a precios a moneda constante un 40% más bajos que el año pasado. Descontamos que cuando las lluvias mejoren y el estado de los campos lo permita, se iniciará inmediatamente el proceso de recomposición de existencias.

NOTICIAS CONTRADICTORIAS SOBRE CHINA

Noticias contradictorias sobre el mercado chino de la carne vacuna. Por un lado, todo indica que la recuperación de la economía en general y del consumo en particular, que se insinuaron en el primer trimestre del año, ahora se han enfriando, con una caída en la confianza sobre el futuro de la economía.

Los importadores chinos siguen sosteniendo que hay enormes stocks de carne en cámara, mientras se advierte una presencia muy fuerte de la carne brasileña, con nuestros vecinos aceptando valores más bajos que sus competidores del Mercosur. Los precios de importación parecían haber tocado un piso en la semana del Sial, pero después de la feria se ha producido una nueva baja en los valores ofrecidos por los chinos, que argumentan que las ventas son muy bajas y que el canal de food service y de las comidas fuera de casa siguen muy deprimidos. Hoy China estaría pagando por los principales cortes un 30-35% menos que un año atrás.

Por otro lado se observa que en mayo último los embarques, con destino al gigante asiático, de Brasil (112 mil toneladas), Argentina, Uruguay, Australia y Nueva Zelandia, habrían superado en conjunto las 240 mil toneladas, mostrando una fuerte recuperación con respecto a los meses anteriores. Hace ya unos meses un bróker internacional calificó las crisis de las importaciones chinas como “más un problema de precios que de volúmenes”.

n mayo, las importaciones chinas de carne vacuna totalizaron las 179 mil tn, un 19% menos que igual mes del año pasado. En abril último las compras habían sido de 183 mil tn. Parece consolidarse un piso de importaciones, que aunque resulta más bajo que el promedio del año 2022, igualmente es muy alto.

Debe recordarse que todos los años, para los meses de agosto-noviembre, China acelera sus compras de carne vacuna para abastecer el pico estacional de la demanda que se registra con los festejos masivos del año nuevo lunar chino, que en 2024 se celebrará el 10 de febrero.

Por Ignacio Iriarte | Analista Mercado Ganadero

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