Una burbuja de pesos
Por Salvador Di Stefano | Director de AgroEducación
El gobierno devaluó el peso y bajó la tasa, los 5 pasos para controlar al dólar. Por ahora, y solo por ahora, la burbuja de pesos atrae capitales golondrinas.
El dólar MEP cotiza a $ 963,2 y cotiza con una brecha del 15,9% versus el dólar exportador que es de $ 831,4. El dólar futuro Rofex cotiza con una tasa implícita del 99,7% anual. La tasa de interés de plazo fijo es del 110% anual, que da una tasa efectiva del 186,5% anual. La tasa de inflación esperada a 12 meses del Relevamiento de Expectativa de mercado se espera en el 250% anual. Todo hace presumir que hoy la mejor inversión pasa por tener cosas o hacer un plazo fijo ajustado por inflación.
El dólar importador es el dólar mayorista más el impuesto del 17,5%, eso te da un dólar de $ 943, que es similar al dólar contado con liquidación que cerró en $ 946,3, esto implica que conviene pagar las importaciones con dólares del mercado y no pedirle al gobierno. Esto le pone un piso al precio de los dólares alternativos en $ 943. Si mediara alguna inconsistencia en la política económica, o leyes que traben el accionar del gobierno, los dólares alternativos podrían buscar niveles más elevados.
El gobierno tomó la decisión de eliminar las leliq, dejar una tasa de Pases al 100% anual, e incentivar a los bancos a que tomen deuda en pesos, para ello les permite incrementar la porción de deuda del Estado en sus balances.
En los últimos 12 meses el dólar mayorista aumento un 352% y la inflación esperada podría ubicarse en el 210%, este diferencial es lo que va a ajustarse en los próximos meses. El gobierno ha bajado la tasa de interés para incrementar la demanda de pesos en la economía.
Las cinco medidas para fortalecer el peso
El gobierno tomo 5 medidas para impulsar a que los argentinos demandaran más pesos.
1) La tesorería tendrá superávit fiscal, con lo cual no necesitará más deuda y tampoco se financiará vía emisión de pesos del Banco Central.
2) Se congela el tipo de cambio que se coloca a $ 800 y aleja la especulación por la moneda americana, a lo sumo devaluaría el 2,0% mensual.
3) El Banco Central baja la tasa de interés para empujar a la demanda de pesos. La tasa es negativa frente a la inflación, pero positiva en dólares (por ahora).
4) El Banco Central emitirá un bono en dólares para los importadores para absorber pesos del mercado, y de esta forma se cumplirá a futuro con el pago de importaciones. El bono se llamaría Bono para la Reconstrucción de una Argentina Libre (BOPREAL) se emitirían U$S 30.000 millones, sería a 5 años, pagadero 100% a su vencimiento, pagaría una tasa del 5,0% anual, se podría utilizar para pagar importaciones o impuestos.
5) En quinto lugar, el gobierno confía con todas estas medidas en aumentar la demanda de pesos.
Lo que viene, lo que viene
Los signos de los meses que vienen serían muy recesivos. El Relevamiento de expectativa de mercado espera para el año 2023 una caída del PBI del 1,4%, mientras que para el año 2024 espera una caída del 2,4%. En materia de resultado fiscal primario, espera un déficit para el año 2023 de $ 5,2 billones, mientras que para el año 2024 espera un superávit de $ 250.000 millones.
Lograr superávit fiscal primario implicará menos gasto en consumo público, y esto precipitará la caída en el consumo privado. No parece que la inversión diga presente en el año 2024, pero veríamos una suba de las exportaciones y una baja de importaciones.
Las exportaciones para el año 2023 se estiman en U$S 67.620 millones, mientras que para el año 2024 podrían ser de U$S 83.423 millones, esto implica una suba de U$S 15.803 millones.
Las importaciones para el año 2023 serían de U$S 74.180 millones, y para el año 2024 se esperan en U$S 70.632 millones, por efecto de menso inversión y actividad económica, esto implicaría una caída de U$S 3.548 millones.
De esta forma pasaríamos de un déficit de U$S 6.560 millones en el año 2023 a un superávit de U$S 12.791 millones. Punta a punta sería una recuperación de U$S 19.351 millones que debería engrosar en buena medida las reservas del Banco Central.
Esto último es lo que nos hace optimista de cara al segundo semestre del año 2024, y esperar una fuerte recuperación en el año 2025.
Conclusión
. – Es central que Argentina en los años 2024 siga con un tipo de cambio alto, trate de tener una regla monetaria para no expandir los agregados monetarios y de esta forma tener controlada la inflación. Si solo ancla el tipo de cambio estará en problemas a futuro.
. – Es necesario tener superávit fiscal, para de esta forma no emitir dinero y tampoco endeudarse en los mercados financieros.
. – La balanza de pagos puede pasar de negativa a positiva, y esto dar lugar a una recomposición de reservas. Para que todo esto suceda es necesario que se apunte a fortalecer los negocios ligados a la exportación, no aplicando nuevos tributos que desalienten el negocio.
. – El mercado interno mostrará un comportamiento recesivo, ya que sin nuevas inversiones será difícil recomponer el salario del trabajador. El gobierno debería reflexionar y descartar la actual propuesta de blanqueo, por otra más generosa y más efectiva a corto plazo, de modo de generar mayores inversiones que atemperen la caída del poder adquisitivo de los salarios. La moratoria que propone la AFIP se parece más a un plan de facilidades de pago que a una moratoria, así no será efectiva, se necesita más generosidad.
. – Si el ministro de economía Luis Caputo es el mismo de siempre, no descartar que aliente el ingreso de capitales golondrinas, dejando el tipo de cambio alto y la tasa baja. Hay que colocarse en plazo fijo UVA, bonos soberanos y Obligaciones negociables. De corto plazo los bonos dólar linked y duales no son atractivos.
. – El gobierno buscará el financiamiento de los bancos para canjear leliq por bonos del tesoro, y de esta forma reducir los pasivos monetarios remunerados del BCRA y pasarlos al Tesoro. El dólar de equilibrio podría disminuir, no obstante, un bolsón de liquidez quedará merodeando en el mercado, y si hay algún problema se activaran las alarmas. El mercado sigue de fiesta, pero por las dudas usted quédese cerca de la puerta.
Por Salvador Di Stefano | Director de AgroEducación
Curso de Postgrado en Agronegocios